Cambalache 3,14 - La vidriera irrespetuosa

Sevilla Acoge, una organización que desde el año 1.985 propicia que las personas nacidas aquí y las que vienen de fuera buscando un mundo mejor, puedan convivir, respetarse las unas a las otras, y caminar hacia un nuevo estilo de sociedad intercultural, donde todos disfrutemos de los mismos derechos y cumplamos nuestras respectivas obligaciones, ha sufrido un acto vandálico esta noche en su sede, en los bajos del Puente del Cristo de la Expiración.

Sobre las 2 de la madrugada del 23 de mayo, una o unas personas rompieron la cristalera de uno de los despachos que da al exterior, según los peritos de la compañía aseguradora, separaron los barrotes de la reja e introdujeron líquido inflamable. Todo el despacho prendió fuego y quedo destrozado, techos, paredes, documentos, sistema informático…etc. La puerta de dicho despacho que estaba cerrada, impidió que el fuego se extendiera al resto de las dependencias, evitando así daños mayores.

Personas anónimas avisaron a los bomberos haciéndose pasar por los vigilantes del garaje colindante, quienes nos aseguran que ellos ni siguieran habían advertido el fuego.

Al llegar esta mañana a nuestra sede el aspecto era dantesco. El fuego había destrozado por completo el despacho, se había cortado la electricidad, la centralita telefónica, la central de los ordenadores… Todos los servicios de la Fundación quedaron momentáneamente interrumpidos, y gracias al esfuerzo de todos, y pese a la situación, se sigue acogiendo a las personas que llegan.

¿Quienes han sido estos vándalos y que intentan conseguir impidiendo la labor de una organización que busca la mediación intercultural y el entendimiento entre diferentes?

Desde Sevilla Acoge deseamos que estos hechos no se vuelvan a repetir y que la convivencia en nuestra ciudad, en nuestro país, sea como la “soñamos”: de interculturalidad, de solidaridad, y de respeto entre las personas.